MURCIA

Datos del Pueblo

Lorca

Pueblo

  Localidad: Lorca

Municipio

Lorca / Comarca: Alto Guadalentin

Provincia

Murcia

Comunidad

Murciana

Habt. / Ine 2004

87153

 

Ayuntamiento

Dirección

Plaza de España, 1

Código postal

30800 

Teléfono

968 479700

Fax

968 441164

Oficina Turismo

968 46 61 57 / 968 44 19 14

Web Oficial

Lorca

Web de Interés

Lorca portal informativo de la ciudad

Lorca Museo arqueologico de la ciudad

E-mail municipio

ayuntalorca@ayuntalorca.es
 

Son numerosas las leyendas que narran el origen de Lorca. La mayoría tienen un carácter mitológico. Según Méndez Silva (1649), un príncipe troyano llamado Elio, junto a un personaje griego llamado Grota, fueron los fundadores de Eliocroca, que así se llamó en la epoca romana la Lorca romana. El Padre Morote, por otra parte, otorga las fundación de Lorca al príncipe troyano Elio-Urzues, navegante por el "Mare Nostrum". Espinalt escribió en 1778 que "en el año 4.018 de la creación del mundo", un principe troyano llamado Elio fundó una ciudad a la que llamó [Ilorci]. También se pensó en una combinación de los vocablos Helios (sol) y Kraton (gobierno) para formar la denominación de Eliocroca (ciudad gobernada por el Sol). La comarca de Lorca ya estaba poblada por los íberos durante la Edad de Bronce (cultura de El Argar), debido a esto, no se sabe con certeza el año de su fundacion.

Ya ya en el periodo romano encontramos Eliocroca en el Itinerario de Antonio y en la Vía Augusta que unía Tarragona y Jaén. Lorca se convertirá en población de la Cartaginense, un asentamiento agrícola en el que predominarán las villae, villas rusticas romanas. Con la romanización Lorca fue sufriendo una progresiva cristianización y ya en el año 301 dos representantes de la diócesis lorquina acudieron al concilio de Elvira en Granada.

De la Lorca visigoda apenas tenemos noticias. En el 713 se firma el Pacto de Teodomiro donde aparece ya el topónimo de Lurqa, y por el que esta población pasa a integrarse en un territorio autónomo, junto con otras seis ciudades, gobernado por Teodomiro; situación que se mantendrá hasta la muerte de éste y la reorganización del estado musulmán, llevada a cabo por Abb-al-Rahaman II, que convirtió el territorio de Todmir en una demarcación dependiente de Córdoba y así hasta la desmembración del califato con la muerte de Almanzor y la formación de los reinos de Taifas, siendo Lorca uno de ellos

En 1224, Alfonso X, hijo de Fernando III el Santo conquistará Lorca (La torre del homenaje de la fortaleza de Lorca, de planta cuadrada, es visible desde muchos rincones de la ciudad. Se llama Torre Alfonsina, en honor al rey castellano), y la ciudad continuará, como en época árabe, su papel de núcleo de una rica comarca agrícola y de importante actividad artesana, pero el carácter de frontera dificultará el desarrollo de la agricultura.Durante la Reconquista, Lorca fue una peligrosa ciudad fronteriza, atrapada entre el reino de Castilla y el reino moro de Granada. Así Lorca va a ser la llave del Reino, pero también la base de partida para incursiones a territorio enemigo. Será la batalla de los Alporchones, en 1452, la que dé fin a los enfrentamientos en la frontera lorquina en el reinado de Juan II, quien diez años antes concedió a Lorca el titulo de noble ciudad .

Concluida la Guerra de Granada y desaparecido el peligro musulmán, la ciudad cambia de fisonomía, se llevaran a cabo reformas urbanísticas, se desarrollará el comercio y la explotación del campo de forma continuada. Las numerosas obras públicas que se efectuaron atrajeron a obreros y canteros de otros lugares, produciéndose una considerable corriente de inmigración que aumento la población hasta los 8000 habitantes. Entre las nuevas construcciones destaca la Colegiata de San Patricio, erigida en 1553, que será el centro religioso de la ciudad, pero también numerosos conventos como los de la Merced, Santo Domingo y San Francisco

Con el siglo XVII Lorca se va configurando como una urbe moderna, pero no descuida sus posiciones defensivas, sobre todo en la costa, ya que el peligro turco y berberisco amenazaba continuamente el litoral, sembrando la desolación y cautivando a los habitantes de la zona.

Este siglo será testigo de la expulsión de los moriscos, la epidemia de peste, en la que murió la mitad de la población, y las sequías y las plagas de langosta. Pese a ello a partir de 1660 se inicia un despegue espectacular y asistimos a su recuperación, muestra de ello es la construcción de nuevos edificios entre los que destaca el Palacio de Guevara
El siglo XVIII tiene una importancia vital para la ciudad, al ser una de las comarcas favorecidas por el Reformismo Borbónico. Lorca se configura como una ciudad moderna, perdiendo sus caracteres medievales. La población crece, se extiende y se instala en los barrios periféricos de San Cristóbal y San Jose. La muralla desaparece, lo que es indicativo de mayor seguridad. El comercio de la barrilla hace que se instalen en Lorca y en el puerto de Águilas importantes casas de comercio, lo que desarrollará la burocracia y el funcionariado y un buen numero de obras publicas, convirtiéndose la ciudad en refugio de pintores, escultores y grabadores que despliegan en ella su actividad artística

A comienzos del siglo XIX contará con un modelo socioeconómico que será el de una comunidad preindustrial caracterizada por el predominio del sector primario y el fuerte aumento de la población. Pero la rotura del Pantano de Puentes, en 1802, la Guerra de la Independencia y las epidemias de fiebre amarilla, así como las pertinaces sequías, en tiempos de la Regencia de Espartero, trajeron consigo el hambre y la emigración de mas de doce mil personas; además, la desaparición del comercio de la barrilla privó a la comarca de uno de sus más saneados ingresos

En este siglo el término municipal de Lorca va a sufrir considerables variaciones: si al comienzo de la centuria engloba los municipios de Águilas, Puerto-Lumbreras y parte del de Mazarrón, al concluir el siglo se configura con la misma extensión que posee en la actualidad

En 1865 llegara a Lorca la primera máquina de vapor. El ferrocarril Alcantarilla-Lorca inaugurado en 1885 y el Baza-Lorca, cinco años mas tarde, va a suponer la integración de la comarca en el mercado nacional, posibilitando el movimiento de los minerales de los yacimientos litorales y de las minas de azufre y manganeso del interior

La Restauración lleva aparejada un periodo de prosperidad y de calma política, la ciudad se embellecerá con las glorietas de San Vicente, del Teatro y Colon, con la construcción del Casino Artístico y Literario en 1885, del Teatro Guerra en 1861, de la Plaza de Toros en 1892, etc.

A comienzos de siglo XX la intensa explotación de los yacimientos mineros de la zona litoral va a suponer un relanzamiento de la vida económica de la comarca. La guerra civil, el terrible drama de la España contemporánea, va a traer consigo paradójicamente el inicio de la recuperación demográfica, aunque en las dos décadas siguientes se producirá un estancamiento poblacional como consecuencia de la emigración. Pero en la actualidad este flujo se ha invertido: los curtidos, la alfarería, el cemento y las chacinerías dan a una ciudad eminentemente agrícola y ganadera un tono industrial al que esta adscrito un importante porcentaje de la población.

El siglo XX ha significado para Lorca, en definitiva, el progreso, el despegue tecnológico el cambio lento y paulatino de las estructuras sociales, la especialización de los sectores productivos, etc

El 29 de enero de 2005 se produjo un terremoto de 4,6 grados en la escala de Richter con epicentro en las pedanías de La Paca (1.068 habitantes en 2005) y Zarcilla de Ramos (1.077 habitantes en 2005), que provocaron diversos daños materiales, sobre todo en la estructura de diversos edificios, tanto en las ya citadas pedanías como en Avilés, Coy, Doña Inés, Don Gonzalo, El Pardo, La Canaleja y Zarzadilla de Totana .

Destacan entre otros:

Columna Miliaria de la época romana
Fortaleza del Castillo
Pósito
Palacio de Guevara (casa de las columnas)
El Ayuntamiento
la Colegiata de San Patricio
Porche de San Antonio (puerta de entrada al conjunto amurallado de la ciudad)
La Muralla (actualmente inmersa en actividades arqueológicas y de restauracion)

El yacimiento de “Los Cipreses” (La Torrecilla, Lorca) es excepcional, porque en él se han logrado conservar con el paso del tiempo, los restos de uno de los poblados argáricos ubicados en llanura; es por ello, por lo que durante los meses de noviembre de 2002 a octubre de 2003, la Concejalía de Empleo del Ayuntamiento de Lorca y el Servicio Regional de Formación y Empleo , pusieron en marcha el proyecto de puesta en valor y musealización del yacimiento. Dicho proyecto se ha llevado a cabo a través de un programa de Taller de Empleo con la financiación del Fondo Social Europeo y del Ayuntamiento de Lorca. Como resultado de los trabajos que en el se han realizado se ha podido abrir el primer Parque Arqueológico en llanura del Argar

Las pedanías del municipio son: Aguaderas, Almendricos, Avilés, Barranco Hondo, Bejar, Campillo, Carrasquilla, Cazalla, Coy, Culebrina, Doña Inés, Escucha, Fontanares, Garrobillo, Hinojar, Hoya, Humbría, Jarales, La Paca, La Tova, Marchena, Morata, Nogalte, Ortillo, Parrilla, Río, Sutullena, Torrecilla, Tercia, Tiata, Torrealvilla, Pulgara, Purias, Puntarrón, Ramonete, Pozo Higuera, Zarcilla de Totana, Zarcilla de Ramos y Zarzalico.